Endrick da el callo | OneFootball

El delantero del Real Madrid, Endrick, ha firmado una temporada más que óptima pese a las pocas oportunidades

En apenas 847 minutos sobre el rectángulo de juego, Endrick ha rubricado un total de siete tantos (cinco en Copa del Rey, uno en UEFA Champions League y otro en LaLiga EA Sports) en su primera temporada como jugador del Real Madrid. Ni el más osado se atreve a poner un pero al curso del crack brasileño en Chamartín.

El joven ariete madridista, sin apenas oportunidades y sumido en el ostracismo, ha sabido dar el do de pecho. En vez de hincar rodilla, Endrick siempre mantuvo viva la llama de la ilusión y las ganas por pulirse como futbolista. Y eso, sin duda alguna, lo ha conseguido. Entendió a la perfección su papel en el bloque merengue.

«Si quieres estar en el Madrid es habitual chupar un poco de banquillo», espetó Carlo Ancelotti en una rueda de prensa hace varias semanas. Por ese filtro ha pasado el internacional con Brasil, que va a causar baja en el Mundial de Clubes de Estados Unidos tras caer lesionado en el choque liguero ante el Sevilla.

«Tras las pruebas realizadas a nuestro jugador Endrick por los Servicios Médicos del Real Madrid se le ha diagnosticado una lesión del tendón conjunto de los isquiotibiales de su pierna derecha», informó la entidad presidida por Florentino Pérez el pasado 21 de mayo.

La dolencia, que se prolongará durante dos meses, deja a Endrick sin la posibilidad de disputar el torneo estival que arranca en el continente americano el próximo sábado 14 de junio (el día 18, miércoles, debutará el Madrid frente al Al Hilal). Por tanto, el ex del Palmeiras se despide de la escuadra de las 15 Copas de Europa hasta el ejercicio 2025/26.

Un futuro prometedor

Así las cosas, el madridismo ya ha podido hacer un balance general sobre el buen hacer del pupilo de Xabi Alonso. Con 37 partidos disputados entre todas las competiciones, siendo solo de la partida en siete de ellos, la nota final de Endrick no baja del notable alto. El futuro, muy halagüeño. Puede dejar una excelsa impronta en la capital de España.