El Sanse acelera su preparación | OneFootball

El ascenso siempre es motivo de celebración. Pero también impone un ritmo vertiginoso. El Sanse, filial de la Real Sociedad, apenas tendrá tiempo para saborear su regreso a LaLiga Hypermotion tras lograrlo en un vibrante playoff. Con un calendario comprimido y el inicio liguero fijado para la primera quincena de agosto, el equipo afrontará una pretemporada exprés. Estará marcada por la intensidad y la exigencia.

Serán cuatro semanas de preparación en las que el conjunto dirigido por Ansotegi tendrá que afinar automatismos, recuperar piernas y adquirir ritmo de competición. Cuatro partidos amistosos marcarán el breve camino hacia el debut en Segunda. Rivales con estilos diversos y exigencias distintas para testar el crecimiento de un bloque joven pero ambicioso.

Cuatro rivales, cuatro pruebas exigentes para el Sanse

El Sanse arrancará su pretemporada enfrentándose al Osasuna B. Un rival conocido del pasado reciente y perfecto para comenzar a calibrar sensaciones. Luego llegará el turno del Unionistas de Salamanca. Un equipo correoso y combativo que pondrá a prueba el físico y la concentración del filial txuri-urdin.

Foto: El Día de Córdoba

Pero la cita más llamativa será ante el Stade Rennais. Un histórico del fútbol francés y club con tradición europea. Un duelo internacional que servirá para medir el nivel competitivo del Sanse frente a una plantilla de primer nivel. Y a solo una semana del inicio de la liga, cerrarán la pretemporada ante el Mirandés. El equipo que se ha consolidado en la categoría con su último playoff. Un termómetro ideal para saber si los deberes están hechos.

Un reto que no espera a nadie

La planificación del Sanse responde a una realidad que no admite pausas. En Segunda no se regala nada. El filial blanquiazul, que ya dejó huella en su anterior paso por la categoría, quiere llegar listo desde el primer minuto. La apuesta de la Real Sociedad por el talento joven es firme. Pero la exigencia de la categoría obligará a competir con madurez y constancia desde el inicio.

Ansotegi tendrá que dar con la receta. La de la cohesión, intensidad y claridad de ideas. Y estos amistosos serán clave para integrar nuevas piezas, ajustar roles y recuperar la chispa competitiva tras un final de temporada tan emocionante como desgastante. El Sanse ha vuelto… pero no hay tiempo para detenerse. En agosto empieza otra batalla.