El mejor derbi de Barcelona se salda con empate | OneFootball

Sant Andreu y Europa dejan un empate en el mejor derbi de Barcelona ante 6.531 espectadores. Los de Aday Benítez siguen dependiendo de ellos mismos para subir directos y los ‘quadribarrats’ esperarán un pinchazo del líder.

El enfrentamiento de élite entre dos aficiones históricas

El fútbol se vive diferente cuando se juega el mejor derbi de Barcelona, y esque no hace falta ver un encuentro de primera división para encontrar dos aficiones que morirían por su equipo (jugando en 2a RFEF). ‘Desperdicis’ (ultras del Sant Andreu) sacó el enorme tifo con un astronauta que presidía la frase «El cielo no es el límite». Por parte de los ‘Eskapulats’ (ultras del Europa), no se quedaron cortos con un tifo con letras griegas: «Enamoras a dioses y mortales».

Los fuegos artificiales y las bengalas que calentaban la previa de un encuentro de suma importancia para ambos en la presente temporada. El Sant Andreu, segundo, quería arrebatarle el liderato a su eterno rival y depender de sí mismo para ascender directo. Las entradas del partido, completamente agotadas, denotaban que nadie se lo quería perder.

Dos aficiones ‘de primera’ | Fuente: @MaCrousFotos

Jordi Cano, pesadilla para la defensa ‘quadribarrada’

Con todo puesto a punto, Sant Andreu y Europa salieron al terreno de juego con sus respectivos planteamientos de partido. Pareció salirle la jugada mejor a Aday Benítez (Europa), que se fue mandando al descanso en el marcador.

El encargado de adelantar a los visitantes fue Jordi Cano (0-1), que cuando pasaba el cuarto de hora batió a Nil dentro del área. Con pierna zurda, la cruzó lamiendo el palo derecho del portero para celebrar delante de su afición la victoria momentánea.

Jordi Cano fue el mejor del Europa | Fuente: C.E. Europa

Cano, sin embargo, fue el jugador más peligroso del Europa en el cómputo global del partido. Poco después del gol tuvo otra que salvó el portero local, y se acercó en la segunda parte en más ocasiones para sumar su segundo tanto. A la defensa del Sant Andreu se le atragantó tener que defender al rápido e inteligente delantero catalán.

Fiesta insuficiente en el Narcís

Alentados por los habituales cánticos de la afición del Sant Andreu, los locales intentaron de forma reiterada tomar el control del partido. Ciertamente lo tuvieron, pero la sensación de peligro no era notoria. Los de Xavi Molist sufieron en defensa y en ataque: «Nos han penalizado con un juego directo, y eso es lo que tendríamos que haber controlado», declaró el entrenador en rueda de prensa tras el partido.

Pero la segunda parte tuvo un lavado de cara para el conjunto ‘sanandreuenc’, que salió con más ímpetu y ganas los 45 minutos restantes. Sergi Serrano, que no pudo desarrollar su juego, la pegó al larguero desde dentro del área en la más clara hasta el momento.

Los locales crecían por momentos y en tanto estaba al caer. Tanto es así que fue finalmente el joven Marc Jurado quien puso las tablas (1-1) en el marcador en un centro de Lucas Viña que intentaba cazar un Mendes muy errático. El cántico de ‘Dale UESA’ invadió el estadio e incluso el barrio, con bufandas al aire que pedían la remontada. No obstante, esas ganas no fueron suficientes para lograrlo, dejando un sabor agridulce con el empate para ambos equipos.