La Colina de Nervión
·17. Dezember 2024
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Rubén Baraja sigue teniendo las horas contadas en el Valencia CF. Esa es al menos la sensación general que tienen todos los aficionados che. La realidad del equipo es realmente dramática en LaLiga. Son colistas y cayeron ante su gran rival directo el pasado fin de semana. Además, el Valencia CF no tendrá garantías de acudir al mercado de fichajes de enero para salvar la categoría. En este contexto, Peter Lim y la directiva trata de buscar ciertas alternativas a Baraja dentro del club. Parecían haber dado con algunas de ellas, pero las novedades no son precisamente alentadoras. La soga del descenso sigue apretando como nunca.
Pocos jugadores han dado tanto al Valencia CF como Rubén Baraja. Era uno de los futbolistas más queridos por Mestalla, de ahí su incorporación al banquillo. Pudo solventar ciertos problemas de la entidad la pasada temporada. Con ello se ganó el derecho a seguir, pero su futuro está más en entredicho que nunca. La situación es evidente: el Valencia CF busca entrenador en el mercado de fichajes. En la mesa, nombres como los de Quique Sánchez Flores o incluso Álvaro Cervera. Ambos tienen sobrada experiencia en LaLiga, de ahí que puedan ser soluciones a corto plazo.
La derrota contra el Real Valladolid hizo mucho daño en la afición che. Los valencianistas aspiraban a cambiar la dinámica en el José Zorrilla, pero no fue así. Sobre el terreno de juego se evidenciaron las diferencias entre Rubén Baraja y sus jugadores. El 1-0 hizo activar varios planes en el mercado de fichajes del Valencia CF. El favorito en las horas posteriores no era otro que Quique Sánchez Flores. El ex del Atlético de Madrid y Sevilla FC tenía una serie de exigencias para hacerse cargo del equipo desde ese fin de semana.
Quique Sánchez Flores en su etapa en el Sevilla FC I Foto de: Juan Manuel Serrano Arce/Getty Images
Acorde a lo comentado por el reputado periodista Héctor Gómez, Rubén Baraja sigue en el cargo porque Quique no dio el visto bueno. Las negociaciones se intensificaron el sábado. Fue ahí cuando Sánchez Flores decidió no dar luz verde al proyecto de Mestalla. Se hablaba, entre otros temas, de la posible inversión del Valencia CF en el mercado de fichajes. Además, el entrenador pedía un salario acorde a la exigencia de la tarea. Como ninguna de sus peticiones fue correspondida, decidió rechazar la propuesta. El Valencia CF vive sus días más oscuros de las últimas décadas. Baraja seguirá al frente hasta que un entrenador quiera hacerse cargo del Valencia. Por el momento, no hay más opciones serias sobre la mesa.